Los eventos inusuales que ocurrieron durante el terremoto del Japón, comienzan a salir a luz. Las tomas de la televisión japonesa (las cuales presentamos en nuestra sección de video), pasaron inadvertidas ante la magnitud de la catástrofe. Presentamos aquí tres impresionantes videos que muestran un objeto que sale de las olas del Tsunami y otra más de un objeto tomado desde un avión comercial días antes.
En Guatemala siglo 30 ha recibido reportes de una rara sensación de que el cielo estaba “raro” la tarde del día 11 de marzo, horas después del terremoto de Japón. Las nubes presentaban un aspecto inusual y era como si algo no estaba bien. Las personas que reportaron esto son sensitivas a este tipo de fenómeno. Sin duda la intensa agitación o estado alterado de miles de personas en la isla asiática además de el rompimiento de la corteza terrestre en esa región, lo cual esta demostrado provoca emanación de gases como el radón.
Este mismo fenómeno ocurrió durante el terremoto de Guatemala, cuestión ampliamente difundida y documentada por el director de esta página.
La duda entre los escépticos persiste, sin embargo en el caso de nuestro país fueron miles de testigos de un cielo color rojo y las reacciones diversas de las aves y mamíferos que presintieron la catástrofe y posterior a ella cuando manifestaron una conducta errática respecto a su habitual forma de vida.
Por aparte se han recibido dos fotografías que muestran que algo extraño ocurrió ese día.
Una de ellas la de Adalberto Tzaj nos envió la siguiente en la cual se muestra una “nube” que presenta una parte brillante en su parte más sólida. Los colores son evidentes y según la hora que fue tomada, las 16:30 horas, se descarta un efecto de luz a especie de celaje. Por hora y posición de la nube los rayos del sol no deberían dar este efecto atmosférico. El fenómeno fue visto por varias personas las que se sorprendieron por lo que estaban viendo en el cielo.
La razón para la meteorología no existe más que un efecto de nubes y luz (¿?), pero para los estudiosos de la energía “psi”, puede deberse de la intensa actividad psiquica unida al efecto geológico, es algo así como la radiación atómica de las plantas que colapsaron y la cual es ahora llevada por los vientos hacia el océano.