Eduardo Mendoza P

Siglo30.

Clases de alucinaciones según la neurología que afectan a nuestros sentidos.

Si clasificamos la experiencia alucinatoria según la forma sensorial en la que aparecen, podemos ver varias clases.

1. Alucinaciones visuales

Se pueden encontrar las alucinaciones visuales, percibidas a través del sentido de la vista. El sujeto ve algo que no existe en la realidad como destellos o luces. Sin embargo, pueden verse elementos más complejos, como personajes, seres animados o escenas vívidas.

Es posible que se visualicen estos elementos con medidas diferentes a las que serían percibidas de ser estos estímulos reales, denominándose alucinaciones grandes o pequeña de tamaño. Dentro de las alucinaciones visuales también se encuentra la autoscopia, en la que un sujeto se ve a sí mismo desde el exterior de su cuerpo.

Las alucinaciones visuales son especialmente frecuentes en afecciones de salud, traumas e ingesta de sustancias alucinógenas , también en trastornos mentales.

2. Alucinaciones auditivas

Respecto a las alucinaciones auditivas, en que el sujeto oye algo irreal, pueden ser ruidos o bien elementos con significado como el habla humana.

Los ejemplos más claros son las alucinaciones en segunda persona, en la que como en el ejemplo antes relatado, una voz habla al sujeto, las alucinaciones en tercera persona en que se oyen voces que hablan del propio individuo entre ellas o las alucinaciones de mandato, en las que el individuo oye voces que le ordenan hacer o dejar de hacer algo. Las alucinaciones de esta área sensorial son las más frecuentes en trastornos mentales, especialmente en la esquizofrenia paranoide.

3. Alucinaciones del gusto y el olfato

En lo que respecta a los sentidos del gusto y olfato, las alucinaciones en éstos sentidos son poco frecuentes y suelen relacionarse con el consumo de drogas u otras sustancias, además de algunos trastornos neurológicos como la epilepsia de lóbulo temporal o incluso en tumores. También aparecen en esquizofrenia, normalmente relacionadas con delirios de envenenamiento o persecución.

4. Alucinaciones

hápticas

Las alucinaciones hápticas son aquellas que hacen referencia al sentido del tacto. Esta tipología incluye gran cantidad de sensaciones, tales como las de temperatura, dolor u hormigueo siendo éstas últimas denominadas parestesias, y destacando entre ellas un subtipo denominado delirio dermatozoico en el cual se tiene la sensación de tener pequeños bichos en el cuerpo, siendo típico de consumo de sustancias como la cocaína.

Al margen de éstas, relacionadas con los sentidos, se pueden identificar dos subtipos más.

En primer lugar las alucinaciones

cenestésicas o somáticas, que provocan sensaciones percibidas respecto a los propios órganos, normalmente vinculados con procesos delirantes extraños.

En segundo y último lugar las alucinaciones cinestésicas o kinésicas se refieren a sensaciones de movimiento del propio cuerpo que no son producidos en la realidad, siendo típico de los pacientes de Parkinson y del consumo de sustancias.

En este sentido nos encontramos con diferentes variantes.

Diferentes modos de falsa percepción

Las denominadas alucinaciones funcionales se desatan ante la presencia de un estímulo que desencadena otro, ésta vez alucinatorio, en la misma modalidad sensorial. Esta alucinación se produce, empieza y acaba a la vez que el estímulo que la origina. Un ejemplo sería la percepción de alguien que percibe una melodía e imagina el momento emotivo de una escena de amor con su pareja.

El mismo fenómeno ocurre en la alucinación refleja la cual puede ser inspirar temor.

La alucinación

extra campina se da en los casos en que la falsa percepción se da fuera del campo perceptivo del individuo. Es decir, se percibe algo más allá de lo que podría percibirse. Un ejemplo es ver a alguien detrás de una puerta, sin otros datos que pudiesen hacer pensar de su existencia.

Otra forma de alucinación es la ausencia de percepción de algo que existe, denominada alucinación negativa. Un ejemplo es la

autos copia negativa, en la que la persona no se percibe a si misma al mirarse a un espejo.

Cabe destacar la existencia de pseudoalucinaciones. Se trata de percepciones con las mismas características que las alucinaciones con la excepción de que el sujeto es consciente de que se trata de elementos irreales.

¿por qué se producen?

Si bien no hay una única explicación al respecto, diversos autores han tratado de explicar sobre este tipo de fenómenos, siendo algunas de las más aceptadas aquellas que consideran que el sujeto que alucina atribuye erróneamente sus experiencias internas a factores externos.

Ejemplo de ello es la teoría de la discriminación

metacognitiva de Slade y Bentall, según la cual el fenómeno alucinatorio se basa en la incapacidad de distinguir la percepción real de la imaginaria. Estos autores consideran que esta capacidad de distinción, la cual se crea y es posible de modificar a través del aprendizaje, puede deberse a un exceso de activación por estrés, falta o exceso de estimulación ambiental, una alta sugestionabilidad.

Otro ejemplo, centrado en las alucinaciones de tipo auditivo, es la teoría de la sub vocalización de Hoffman, la cual indica que estas alucinaciones son la percepción del sujeto de la propia habla subvocal (es decir, nuestra voz interna) como algo ajeno a sí mismo a la generación de actos discursivos internos involuntarios.

Así, las alucinaciones son formas de interpretar la realidad de forma errónea, como si existiesen elementos que realmente están ahí aunque nuestros sentidos parezcan indicar lo contrario. Sin embargo, en el caso de las alucinaciones nuestros órganos sensoriales funcionan perfectamente, lo que cambia es el modo en el que nuestro cerebro procesa la información que llega. Normalmente, esto significa que nuestros recuerdos se mezclan con los datos sensoriales de un modo anómalo, uniendo estímulos visuales experimentados anteriormente

Por ejemplo, esto es lo que ocurre cuando pasamos mucho tiempo a oscuras o con los ojos vendados de modo que nuestros ojos no registrar nada; el cerebro empieza a inventar cosas a causa de la anomalía que supone no recibir datos por esa vía sensorial estando despiertos.

El cerebro que crea un entorno imaginario ya que según algunos el cerebro es autónomo.

La existencia de las alucinaciones nos recuerda que no nos limitamos a registrar datos acerca de lo que ocurre a nuestro alrededor, sino que nuestro sistema nervioso cuenta con los mecanismos para "construir" escenas que nos cuentan qué es lo que ocurre a nuestro alrededor. Algunas enfermedades pueden llegar a desencadenar alucinaciones de modo incontrolado, pero estas forman parte de nuestro día a día, aunque no nos demos cuenta.

NUESTRA POSICION:

1. En el caso de las visiomes de fantasmas y aparecidos (descartamos los espestros), vamos a refutar o justificr.

2. En muchos casos

las razones de la neurociencia son validas , pero no en todos.

Los llamados juegos de la mente si son aplicables a estados de crisis o por ingestióm de drogas y estados de sugestión por stress, sentimiento de duelo sentimientos progfundos de afecto o rechazo, dicotomías de bien y mal, fanatismo, etc.

Sin embargo según la siquiatria no se tiene claro el mecanismo de operación en ciertos momentos donde las afecciones mentales entre la neurosis y la sicosis, no están presentes.

Por ejemplo personas sanas mentalmente sin antecedentes neuróticos o ingesta de farmácos o alucinógenos presentan el fenómeno de alucinación no reiterada.

Casos como ver un objeto sin forma definida, sujeto desconocido o sin alguna relación con el momento vivido como la bilocacion (la persona esta en otro lado), reiterada aparición de fenomenos en áreas determinadas y desconocidas por el sujeto inmerso en el fenómeno, discriminación de detalles y rasgos precisos, visión no fugas o fenómenos aleatorios sin razón en el entorno.

3. Aquí incluimo a los clasificados como espectro, definición de fantasma y aparecidos solo detectados por equipos tecnológicos como cámaras de fotografía, videos , detectores de espectro radioeléctrico, grabadoras de audio frecuencia o algoritmos matemáticos aplicados al video- picel.

4. En los casos auditivos y dérmicos la explicación del inconciente mo se dá generando una voz interna que influye en nuestra conducta sin tener antecedente de una bipolaridad esquizofrénia , quizá en menor grado un alto nivel de sugestion compulsión.

5. Los amplios estudios realizados en las llamadas casas infestadas (encantadas), demuestran que quienes las llegan a habitar no han sido partícipes de evento alguno relacionado con su pasado y presentan la misma fenomenología en distintas personas y en fotma igual y reiterada .

6. Aun la siquiatría no está muy clara sobre como el cerebro puede llegar a ser totalmente autónomo dejando a un lado todo andamiaje de la psicología formativa de muestra conducta a lo largo de la niñez , la adolescencia y la permeabilidad en la etapa adulta.

7. Recalcamos que muchos fenómenos de alucinaciones seguramente no todos son paranormales, pero descartando lo posible e imposible, lo que queda por improbable que sea, esa debe ser la verdad, en otras palabras que esas entidades deben existir en un rango del expectro vibratorio que de pronto por armónica interfiere en nuestro espacio cognitivo afectando nuestros organos sensitivos.

8. No es que no sea real. Es que debe existir en una física que aun joy jo conocemos como ñp dijo Stephen Hawking al referirse a lo que había antes de Big Bag. Quizá lo que nos espera en el futuro de la mecánica cuántica.