HOMBRES Y MUJERES FAMOSOS EN LA CIENCIA, EL FUTBOL O LOS NEGOCIOS LAS USAN.
Con información parcial de BBCmundo y otras fuentes.
Si usted amigo de esta página es uno de los que cree que la buena suerte puede atraerse o alejar la mala fortuna, todo por medio de un ritual, piénselo dos veces si señala como tontos a quien lo hacen.
A lo largo de la historia son millones los que dan testimonio de que realizar actos relacionados con la superstición da resultado. Si lo duda lea con atención lo que grandes figuras realizan para lograr éxito. No es tan solo cruzar los dedos, tocar madera, si no otras cosas más curiosas y a veces desconocidas.
Sorprendase de lo que va a leer, más ahora durante el mundial, donde muchos de los grandes tocan el césped al entrar a la cancha, salen pisando la grama con el pie derecho, los porteros se aferran a los tubos de su portería para que los defienda, se persignan, se halan la camisola, usan las mismas medias con que ganaron algún partido, silban o cantan en voz baja alguna melodía, llevan un amuleto perfectamente escondido y cocido a su pantaloneta, desde las graderías al brujos que hacen toda clase de rituales para que su país gane, se habla de que Brasil no debe jugar (parece que la suerte les ayudo), en los estadios donde durante su construcción murieron obreros y se llega al extremo de que un portero sudamericano se orinaba (poquito pues lo hacia abundantemente en el camerino), arrodilladose como que oraba y lo hacia en la portería. Las supersticiones llegan a las grandes logas del béisbol.
En 1945, el propietario de una taberna llamado William Billy Goat Sianis trató de llevar una cabra a un partido de Serie Mundial, pero se le dijo que su cabra —para la cual había comprado boleto— apestaba demasiado como para permitir su ingreso. Desde entonces ese equipo como una maldición no gana una serie mundial.
Siga usted con atención lo que hacen muchos famosos, hasta llegar a los astronautas antes de salir al espacio desde el astropuerto de Baykonur , Rusia, hacia la estación espacial.
QUE NO LE DE RISA, ELLOS LO TOMAN COMO ALGO MUY SERIO Y DICEN LES HA DADO RESULTADO.
Cameron Diaz se ha declarado una gran supersticiosa, la actriz conserva un collar con una herradura para no envejecer. En entrevista para la revista Cosmopolitan, Cameron contó que "voló un martes 13 con un gato negro bajo su brazo en plena tormenta".
Benicio del Toro es una de las celebridades que toca madera, el actor tiene un anillo de ese material para tenerlo a la mano cada que lo necesite.
Colin Farrell usa los mismos boxers para iniciar el rodaje de sus películas.
Heidi Klum siempre carga su bolsa con dientes de su infancia, la cual usa como amuleto de la buena suerte.
Jennifer Lopez acudió a que leyeran su suerte antes de contraer matrimonio con Ben Affleck. El enlace nunca se llevó a cabo, y se aseguró que la diva del Bronx quemó su vestido de novia para alejar la mala suerte. Se dice que no iba a cantar en la inauguración del mundial Brasil 14, por que su novio la engaño y eso iba a traerle mala suerte a su equipo favorito, a parte de sentirse despechada.
El colombiano Juanes es uno de los famosos más supersticiosos. El cantante da la vuelta a las escaleras para no pasar por debajo, arroja sal sobre su hombro izquierdo con la mano derecha si llega a tirarla por accidente, y se levanta con el pie derecho para atraer la buena suerte.
Luciano Pavarotti nunca viajaba en martes ni viernes si caían en 13.
Se dice que Penélope Cruz frota a menudo su cabeza para atraer la buena suerte y alejar los malos espíritus.
ENRIQUE IGLESIAS
Antes de subir al escenario, Enrique atrae la buena suerte ¡ jugando billar !
JACK NICHOLSON
¡Jamas de los jamases filma si su equipo de baloncesto "Los Angeles Lakers" va a jugar ese dia !
SEAN CONNERY
Por temor a la mala suerte, exige rodar las peliculas cerca de campos de golf, los que segun el, atrae la buena suerte
LOS ASTRONAUTAS Y LAS SUPERSTICIONES.
Monedas
Se considera como mala suerte que la tripulación vea cómo el cohete se traslada hacia la plataforma de lanzamiento, por lo que los astronautas se mantienen alejados.
No obstante, y al igual que los pasajeros, los ingenieros y los familiares también tienen tradiciones que mantener.
La Soyuz es transportada desde su hangar en una línea ferroviaria, empujada por una locomotora diesel a lo largo de varias horas.
Cuando el tren se mueve hacia la plataforma, los espectadores ponen monedas en la vía para que las ruedas las aplastaden.
Se cree que esto trae buena suerte a la misión, y hasta el momento esta costumbre no ha provocado descarrilamientos o ningún otro accidente.
Un cura ortodoxo bendice los cohetes en la plataforma de lanzamiento.
De paso, una vez que el cohete llega a la plataforma de despegue, es bendecido por un sacerdote ordodoxo.
Peluches
En los videos del interior de la cápsula de cualquier lanzamiento ruso, se puede ver un peluche colgando del panel de control.
Durante el despegue de la expedición Nº40 a la EEI, el juguete en cuestión era un peluche de jirafa de la hija de un astronauta de la Nasa, Reid Wiseman.
Reid Wiseman tuiteó esta imagen con su peluche desde la EEI.
Pero estos juguetes no solo sirven como mascotas, también sirven para un propósito serio: cuando los cohetes han terminado de quemarse y la Soyuz alcanza la órbita, los peluches flotan libremente indicando que los astronautas están en estado de ingravidez.
Es el equivalente a usar un canario en una mina para controlar la calidad del aire, aunque en este caso, cualquier animal de juguete vale.
CD de canciones de amor rusas
En toda la historia de los vuelos al espacio rusos y soviéticos, hasta donde sabemos, solo cuatro cosmonautas han perdido la vida durante una misión: el piloto de la Soyuz 1, Vladimir Komarov, en 1967 y la tripulación de tres hombres de la Soyuz 11 en 1971.
Ninguna otra nación tiene tan honorable registro y los rusos están orgullosos de mantenerlo.
La lógica de la superstición dice que si algo se hace de una forma particular y todo fue bien, entonces no hay que cambiar nada.
¿Por qué arriesgarse a cambiar? Una de estas tradiciones viene desde tiempos del mismísimo primer cosmonauta, Yuri Gagarin.
En abril de 1961, Gagarin fue amarrado a su cápsula en la plataforma de lanzamiento; se habían cerrado compuertas, realizado comprobaciones y estaba listo para volar.
Con nada que hacer salvo mirar al panel de instrumentos a unos pocos centímetros de su cara, pidió al equipo de control que pusieran algo de música por el intercomunicador.
Pusieron canciones de amor rusas.
Yuri Gagarin pidió música mientras esperaba en la cápsula.
Exactamente lo mismo pasa hoy, aunque la selección musical es más amplia en cuanto a gustos y es seleccionada por la tripulación entera. Por cada canción de amor rusa seguro que hay una de "Rocket Man" o techno alemán.
Vaciar la vejiga
Probablemente la tradición más extraordinaria del programa espacial ruso también se remonta a la época de Gagarin.
Aparentemente (nadie lo sabe a ciencia cierta), en su camino hacia la plataforma de lanzamiento, Gagarin pidió al conductor de autobús que parara para hacer sus necesidades.
Salió y orinó en el neumático trasero derecho.
Antes de su vuelo, Gagarin tuvo que bajarse del bus para orinar y así se inició la tradición.
En 1961 esto tenía sentido, ya que el primer hombre en el espacio no quería que hubiera glóbulos de orina flotando por su cápsula.
Hoy los astronautas llevan pañales que están atados a sus trajes espaciales de tres capas, que son sellados y probados en busca de fugas antes de subirse al autobús.
De todas formas, los astronautas masculinos aún salen del autobús, se bajan la cremallera y orinan en el neumático trasero derecho.
Los encargados de los trajes tienen entonces que hacer todo el lío de sellar los pañales nuevamente. Se sabe que las astronautas mujeres traen muestras de su orina para echarlos por la rueda.
Una toalla
Cada viajero espacial sabe lo extremadamente útil que es tener una toalla.
También gracias al libro de ciencia ficción "Guía del autoestopista galáctico", de Douglas Adams, en el que se describe este elemento como una herramienta multiuso que puede servir desde máscara de gas hasta incluso como arma de combate.
Por eso algunos astronautas celebran el día de la toalla el 25 de mayo, una nueva tradición espacial de la cual Yuri Gagarin estaría orgulloso.
Así que si usted es supersticioso no se sienta mal, según estudios esto ayuda no solo a subir su tono y ego, si no a darle seguridad y “poder de intención”, esto último estudiado hoy día incluso por físicos cuánticos. EMP