El ser humano ha sido definido como Homo Sapiens. El nombre científico alude al rasgo biológico más característico: sapiens significa sabio o capaz de conocer, y se refiere a la consideración como «animal racional», al contrario que todas las otras especies.
Algunos grupos lo identifican como un ser integrado en cuerpo, alma y espíritu, esto es mas inclinado a la interpretación religiosa que como sabemos resulta ser hasta fantasiosa o como el camaleón, adoptada por conveniencia.
Otros convergen en unificarlo con el sustantivo persona, sustantivo que hemos aclarado en otros artículos, atenidos a su etimología o sea: persona = máscara.
Y en cuanto sociedad pues la definición común sería: La sociedad es el conjunto de individuos que comparten fines, conductas y cultura, y que se relacionan interactuando entre sí, cooperativamente, para formar un grupo o una comunidad.
Existen sociedades animales cuyo estudio lo realiza la sociobiología o la etología social, como las sociedades de hormigas o las de primates.
Valga esto como introducción a la contemplación que nos permite mantener el acontecer diario y a la luz del conocimiento contemporáneo que aunque usted no lo crea, aun está limitado respecto al ser humano.
Pero no es lo mismo definirlo que descubrirlo porque si hacemos caso a las hipótesis respecto a que el ser humano es el compendio del universo se hace complejo aunque la psicología tiene conceptos establecidos.
Bueno y hay hasta una clasificación que al menos refieren dos estudiosos que citamos: Los sistemas tipológicos de Kretschmerson, el pícnico, el atlético y el leptosómico; en el de Sheldon, el endomorfo, el mesomorfo y el ectomorfo.
Dispensarán si no profundizamos en cada uno de estos pues la intención, cuando escribimos es estimular el conocimiento mediante la curiosidad que, ya dijimos en alguna ocasión, es la raíz del estudio, la lectura y faltaba más, la investigación.
Esto en cuanto la constitución física pero en el mental, imagínese usted, aun no hay estudios definitivos que aseguren, por ejemplo, que la conciencia está en la mente, que el creador está en el cerebro y en fin, para que continuar.
A lo que te traje:
En la Web de “La Flecha”, un sitio que trata diversos aspectos de la vida diaria, la sección dedicada a la tecnología, publicó un artículo con el título “la vida humana ya puede digitalizarse”.
Es un nuevo sistema informatizado, sustentado en todo tipo de avances tecnológicos que permite registrar cada cosa que vean y oigan las personas, sus contactos sociales e incluso aspectos que ellos mismos no pueden percibir.
En la última línea, desearía que los lectores relacionen a quienes desarrollaron el sistema y al o a los sujetos a que se refieren.
Seguimos: todos los datos pueden almacenarse digitalmente y crear una especie de memoria extendida que se alberga en archivos digitales personalizados. Las posibilidades, señala la información, aunque la tecnología aplicada aun está en fase embrionaria, ofrece múltiples aplicaciones potenciales, desde las médicas hasta la posibilidad de dejar nuestros recuerdos a nuestros descendientes.
A ver que pasa pero en tanto, les cuento que un grupo de científicos europeos lanzó un proyecto que busca desarrollar robots que aprendan a interactuar con los seres humanos de una manera emotiva.
El propósito, según la BBC de Londres, en despacho fechado el 23 de Febrero 2007, es construir robots que aprendan de los humanos y respondan de una manera social y emocionalmente apropiada, comentó la coordinadora del proyecto “Feelix Growing” o “Feliz Crecimiento”, Lola Canamero.
La investigadora, según la nota, compara a los robots con los bebés que aprenden su comportamiento de los patrones de movimiento y del estado emocional del mundo alrededor de ellos.
Se me antoja que a eso es precisamente lo que los actuales humanos que pertenecemos a los miles de millones, poco más de seis mil, estamos sujetos. Sabía usted que 190 personas tienen el dominio de todos los terrícolas desde que nacemos, crecemos, nos desarrollamos y morimos como suele ser la cantata popular echada a rodar por la ciencia.
No cabe duda como dice Facundo Cabral en los conciertos con Alberto Cortés, tendría que abandonar la escuela para desaprender e instruirse como lo haría y aun hacen algunos autodidactas.
Ahh...pero la ciencia de la tecnología lo toma todo en cuenta porque además, en nota del 7 de marzo 2007, la BBC titula “Código ético para robots”, la que compartiremos en una próxima entrega.