EL MILAGRO Y EL FANTASMA DEL HURACAN ADRIAN
EL MILAGRO Y EL FANTASMA DEL HURACAN ADRIAN

¡Tres países salvados por un fenómeno increíble!

Escuche los testimonios reproduciendo

el programa en el menú del Siglo XXX

Lunes 16 de mayo de 2005, horas de la mañana. El servicio Meteorológico de Guatemala veía preocupado la formación anormal de un sistema de baja presión que presagiaba la formación de una depresión tropical en el océano pacifico. El pronostico era que para el jueves de esa semana, habría lluvias sobre el territorio nacional, esa cosa estaba a más de 300 kilómetros.

¡Tres países salvados por un fenómeno increíble!

Escuche los testimonios reproduciendo

el programa en el menú del Siglo XXX

Lunes 16 de mayo de 2005, horas de la mañana. El servicio Meteorológico de Guatemala veía preocupado la formación anormal de un sistema de baja presión que presagiaba la formación de una depresión tropical en el océano pacifico. El pronostico era que para el jueves de esa semana, habría lluvias sobre el territorio nacional, esa cosa estaba a más de 300 kilómetros.

Para el martes el fenómeno era ya predecible y lo que se vigilaba era la dirección. La sorpresa fue mayúscula cuando se recibió información del Centro de Huracanes de Miami. La posible ruta era sur-este, cuestión que era inusual.

Por lo general las tormentas y huracanes en el pacifico suben con rumbo noroeste, pero esta estaba haciendo todo lo contrario.

Para el miércoles 18, era tormenta y estaba a menos de 200 kilómetros, sus vientos sostenidos de 85 a 90 Km/hora, con una velocidad de 14 kilómetros hacia adelante. El rumbo preocupaba a Guatemala y el Salvador, pues continuaba siendo atípico. Según todas las graficas e imagen de satélite se estaba desviándo aún más con dirección hacia el sur-este.

Para el jueves por la mañana la cuestión era alerta roja en toda la parte sur de los dos países. Se esperaba que la tormenta tropical Andrés tocara costas del Salvador en horas de la noche. Los habitantes de la pequeña nación estaban asustados. Rodrigo Calvo de 4-visión TV, en una comunicación telefónica a Telediario de canal 3 de Guatemala dijo: “Estamos temerosos, los salvadoreños no hemos pasado una situación de esta naturaleza. El huracán llegara en una hora y media”.

La tormenta tenia grado de huracán grado I y estaba a tan solo 50 kilómetros de la costa. El aeropuerto internacional estaba cerrado y tal era el temor que todos los aviones fueron estacionados con el morro hacia el torbellino que venía del mar. La noche del jueves se presagiaba dramática.

Hubo posteriormente un silencio sepulcral durante el resto de ese día y la madrugada del viernes 20. Todos esperaban al amanecer que las noticias difundieran el número de muertos, edificios dañados, derrumbes en carreteras y quizá el caos total. No obstante no hubo nada, ni una sola persona fallecida, las carreteras casi intactas, los edificios y casas sin daño alguno.

¿Qué había pasado? Un sueño, un mal cálculo, un engaño?

EL MILAGRO SE REALIZÓ.

Nadie podría haber pensado que a un huracán algo podría desintegrarlo y más aún antes de entrar a tierra. Si esto fuera posible, sería la solución para evitar la tragedia, el desastre y por consiguiente la muerte. Ningún físico o meteorólogo del mundo podría imaginar que esto pudiera ocurrir un milagro, sin embargo sucedió.

La fuerza destructora fue aniquilada en apenas minutos. La explicación del Ing. Hedy Sánchez, director del INSIVUMEH fue:

“En forma milagrosa una corriente de aire frío en forma de chorro, proveniente del golfo de México desvió y neutralizo el huracán”.

Prácticamente lo destruyó , lo aniquiló, lo bajo en minutos de huracán grado I , a tormenta y luego a una simple depresión tropical. ¡Milagroso, increíble, inusual! ¡Algo que será motivo de estudio y quedará para la historia!

La misma naturaleza operó para salvar a tres países que estaban amenazados. Tres países pequeños, una franja de tierra que en el mapa se ve endeble, tres naciones del tercer mundo, pobres y sin recursos para reponerse rápidamente del impacto.

EL FANTASMA DEL HURACÁN.

Rudy Zepeda y su camarógrafo Luis Hernández fueron asignados a cubrir la costa sureste del territorio de Guatemala. El Huracán Andrian estaba casi ya sobre el país.

Era la noche del miércoles 18 y a eso de las 10 de la noche buscaron un hotel , que para ese entonces todos se encontraban totalmente vacíos. Estaban conscientes de que les esperaba algo peor que el Micht, huracán que dejo en Centroamérica miles de muertos en 1998.

Eran las 23:00 y el calor era insoportable, no se podía dormir, además de presentía algo, una cosa que en el mar se movía rumbo a ellos.

Rudy nos relata: “Era la madrugada y a penas había dormido. No se si lo estaba o solo dormitaba. De pronto vi hacia donde estaba el baño. Había allí una especie de hombre con una capa que era agitada por el viento. El vestido era negro, no se le veía la cara. Una extraña fuerza me inmovilizaba y yo intentaba gritar para que mi compañero me ayudara. Nada pasaba, mi cuerpo estaba como pegado y mi voz no me salía. Poco a poco mi fue sobreponiendo a esa extraña fuerza, yo sentía que no era nada bueno. Mentalmente rezaba y pedía a Dios que me ayudara. Paulatinamente la imagen desapareció y yo pude ver que ya no había nada. ¡Fue horrible , fue real y no creo que estuviera dormido y sufriendo una pesadilla!”

A escasas horas, muy temprano del jueves salieron del hotel rumbo a la frontera con el Salvador, se dirigía a un lugar llamado la “Barrona”, unos 180 kilómetros de la capital. Un lugar desolado ya que los pocos habitantes habían sido evacuados. En el trayecto y con un poco de vergüenza Rudy le relato a su camarógrafo lo que había vivido esa madrugada. Luis al escuchar el relato se puso a temblar. La razón lo evidencia la respuesta: “Rudy , yo escuche que algo te pasaba. Como había calor yo estaba durmiendo en el suelo. Temí despertarte pues en mi pueblo dicen que si uno lo hace puede ser malo. Pero te cuento que luego de que eso sucedió , yo también sentí una extraña presencia en el cuarto. No se cuanto tiempo después, pero mi cuerpo no respondía, yo trataba de pararme, pero no podía. En esas estaba, cuando pude observar como sentado en tu cama, una sombra que me dio miedo, nunca me había pasado!

Dos periodistas, su mente cubrir un evento, cansados y sin ser sugestionados por alguna experiencia o relato anterior.

Una energía en forma de ser humano penetró o se encontraba en ese lugar, quizá aun se encuentre allí. Consultado vía telefónica el administrador no externo opinión, pidió no hablar de eso por que eran mentiras. ¿Negó que allí pasan cosas extrañas, para no perjudicar la imagen del hotel?

Lo cierto del asunto es que sucedió... ¡Aún cuando usted no lo crea!.

Deja una respuesta