En ciertas ocasiones nosotros, los humanos, nos encontramos con hechos que se podrían llamar malditos.
La explicación es difícil y e irracional, aparentemente. Esto pasa con el fenómeno de combustión humana espontánea, la cual se produce sin previo aviso o motivo alguno. De pronto un cuerpo se consume en forma interior o exterior, esto en espacio de pocos segundos. Es un hecho hasta ahora inexplicable y a veces ignorado por la ciencia. Al parecer ocurre más frecuentemente en las mujeres o los que en alguna ocasión están saturados de licor. He aquí algunos ejemplos que nos servirán para la comprensión del fenómeno.
El primero de agosto del año 1869, fue llamado el Dr. Berthollo de París, por la policía. La razón era dictaminar sobre un extraño suceso. Una joven mujer en cierta habitación, había sido encontrada totalmente carbonizada. El cuerpo no había sido tocado, y sin embargo, la parte de abajo estaba quemada. No se encontró ningún otro foco de incendio, ni tampoco indicio del posible origen. Las cortinas, la ropa de cama, los objetos de la habitación intactos, todo en perfectas condiciones, salvo el infortunado cuerpo de la víctima. Este daba la impresión horrorosa de haber sido consumido por un horno. En un informe rendido por el Dr. Berthollo a la sociedad Médico-quirúrgica de París, decía: ¨El brazo izquierdo ha quedado completamente quemado, la mano derecha reducida a cenizas, el estómago, corazón y pulmones estaban completamente consumidos. El resto de los órganos irreconocibles¨. Esta mujer, no había gritado ni llamado a nadie, nadie había visto ni escuchado nada... ¡La conclusión a la que se llegó fue que el fuego se había producido desde el interior del cuerpo!.
Cierto día de mayo de 1890, el Dr. Hartwell cruzaba un bosque en el estado de Massachussets, cuando de pronto vio en un claro a una mujer que estaba en cuclillas. Su cuerpo, inexplicablemente, humeaba y mantenía un fuego extraño que no consumía sus vestimentas. La quemaba en hombros y cuerpo. Las piernas estaban prácticamente con fuego y la mujer estaba ya muerta. Como siempre, no se encontró explicación alguna.
OTROS CASOS INEXPLICABLES
En mayo de 1907, en la India, dos policías entraron en una casa, donde descubrieron los restos aún humeantes de una mujer. Se había quemado viva y sus ropas estaban casi intactas. El cuerpo fue llevado a la comisaría donde continuo sacando humo.
El 28 de enero de 1920 , en Pittsburh, el Sr. Houck al regresar a su casa descubrió el cuerpo totalmente calcinado de su esposa. Estaba sobre la mesa de la cocina, donde no había rastro alguno de fuego.
Un caso muy curioso sucedió en Inglaterra, donde se vio salir humo por una ventana. Los vecinos del lugar entraron precipitadamente y descubrieron el cuerpo de la Sra. Bell, de 77 años. Estaba irreconocible y humeaba a chorros. En un diván, el cadáver se encontraba tan negro como si hubiera sido quemado en un horno. De nuevo, no había rastro de fuego por ningún lado.
Casi todos los casos han sido descubiertos cuando ya ha pasado el instante de principiar la combustión; pero existe uno en el cual no fue así.
CASOS OBSERVADOS EN VIVO
En 1908, mes de marzo, Margaret Dewer salió corriendo de su casa en busca de ayuda. La razón era que había visto a su hermana como se incendiaba sola. Los vecinos se precipitaron al lugar y vieron a la víctima quemada viva, en un lecho casi intacto. Este hecho es un verdadero prototipo que indica algo aun más asombroso. ¿Por qué las personas no muestran signos de dolor? ¿Por qué no piden auxilio? ¿por qué ningún ruido?
Un caso inaudito sucedió en Florencia, Estados Unidos. Corre el año de 1951 y en el mes de julio. Una cierta señora, llamada Reeser, vivía en un pequeño cuarto que alquilaba en casa de la familia Carpenter. Aquella mañana, la señora Reeser no había bajado, como era su costumbre, a desayunar. Por este motivo la Sra. Carpenter subió a llamarla. Su asombro fue mayúsculo cuando, al tocar el botón de la puerta, este se encontraba caliente. Cuando por fin pudieron abrir, el asombro se pintó en los rostros. Se encontraron los despojos de la inquilina; estaban calcinados, al igual que el sillón que ocupaba. La policía rápidamente intervino.
De la Sra. Reeser solo quedaban 5 kilos de cenizas. El cráneo se encontraba curiosamente calcinado. La habitación parecía como si una terrible explosión la hubiera tiznado toda. El reloj marcaba las 4 de la mañana con 20 minutos. Nadie de los expertos que llegaron pudo dar una explicación. Uno de ellos dijo que por lo menos se necesitaban unos 1,500 grados para poder quemar así a una persona. El origen de tan intenso calor... aún sigue en el misterio.
Muchas hipótesis se han exteriorizado, pero ninguna predomina. Si bien son casos extremadamente raros, muchos de ellos están perfectamente documentados. La mayoría de los casos se refieren a las mujeres y la razón es aún mas incierta. Solo se puede especular, puesto que todo esta enmarcado en el curioso mundo insólito en que vivimos.
¿Son quemadas vivas por alguna entidad exterior? ¿Se genera tan intenso calor espontáneo dentro de los cuerpos humanos? ¿Se queman por grasa natural del cuerpo al entrar en contacto con una fuente de calor?
Nunca, posiblemente, tendremos la respuesta, sino hasta cuando la ciencia deje de ignorar estos hechos. Es bien es conocido dentro de la Parapsicología el fenómeno de Invunerabilidad, el cual consiste en una ausencia de dolor al contacto con el fuego. ¿Será aquel fenómeno lo contrario a este? ¿Por qué medio se produce? Repetimos, aún no hay respuestas a esto.