En esta última parte de una serie de tres artículos sobre las energías residuales y los fenómenos paranormales, nos orientaremos hacia la hipótesis de la existencia de seres que ocuparían en forma vibracional, cierto segmento del espectro radioeléctrico. Se que la idea suena fantasiosa y quizá hasta digna de un estrafalario humano inclinado hacia la ficción, antes de la ciencia. Sin embargo como antecedente están los dos anteriores artículos donde los argumentos van de la mano con los descubrimientos realizados.

Vayamos por partes y definamos lo que ya alguna vez planteamos, la definición entre fantasmas, espectros y aparecidos.

Según el DRAE - FANTASMA.

(Del lat. phantasma.

3. m. Imagen de una persona muerta que, según algunos, se aparece a los vivos.

Según el DRAE - ESPECTRO:

(Del lat. spectrum).

m. fantasma, imagen de una persona muerta (Del part. de aparecer).

Según el DRAE – APARECIDO.

1.            m. Espectro de un difunto.

Como se puede apreciar ni el mismo Diccionario de la Madre Academia se pone de acuerdo. Como es común de una definición lo envía a otra y de esta otra a la original.

NUESTRO CONCETO.

Fantasma:

Aparición visual y fotografía o de video de un objeto ya sea humano o de cualquier otra índole. Un muerto, un animal, un tren, vehículo cualquiera (barco, auto…), así como cosas informes como bultos, luces, etc. Pueden ser vistas por el ojo de varias personas y son reiteradas en lugares específicos.

ESPECTRO:

Objetos no visibles al ojo humano por su rango de percepción en el espectro de radio frecuencia. Tomados únicamente por medio de cámaras fotográficas o video (analógicas o digitales). Son captadas en rangos de frecuencia entre el blanco y el gris oscuro generalmente. Por ejemplo ORBs, nubes, OVNIS o figuras humanas o humanoides no percibidas por el observador al momento de la toma o tiro de cámara.

APARECIDO:

Se refiere exclusivamente a la aparición de figuras de personas humanas muertas.

TODO ES FRECUENCIA Y RESONANCIA.

Puede que alguien encuentre algunas similitudes entre la definición de los tres términos, sin embargo hay que tomar nota que la diferencia estriba en ser vistos por el ojo, por aparatos tecnológicos y por último que sean de una sola clase como el aparecido. Una vez establecida la diferencia, entremos al análisis del fenómeno de las energías residuales.

Todo lo que vemos, percibimos y captan nuestros ojos o los equipos sensores es energía radiante. Así los colores son frecuencias que van entre los rangos de los 380 y los 450 nm (nanometros), para el violeta. Para el rojo entre 620 y 750 nm. donde “nm” es igual a la milmillonésima de un metro y es la frecuencia a la que está vibrando cada color del espectro de la luz en la retina. La voz humana es frecuencia entre los 100 Hertz y los 2,000 htz. La radio FM esta entre los 88 y los 108 Mhz, donde un Mhz es un millón de ciclos por segundo. De la misma forma los elementos radioactivos como el Uranio su constitución molecular emite radiación muy alta la cual es medida en Roentgen. Los ciclos están presentes en todos lados, así los ciclos de la naturaleza, del sol, la tierra en su rotación, los sistemas de estrellas, las galaxias y hasta el mismo universo.

Somos seres eléctricos y sujetos a frecuencias, en términos generales somos electricidad con frecuencias y resonancias, entendiéndose por resonancia el hecho que vibramos al unísono de otras vibraciones de frecuencia afín, tal como lo hacen las cuerdas de un piano al sonar de un diapasón. Sobre esto es importante resaltar que al vibrar al ritmo de otras vibraciones, estas aún cuando no este muy cerca nos afectan, tal como lo hacen la emanaciones con los ciclos circadianos del sueño.

Un ejemplo de cómo una frecuencia afecta por resonancia es la llamada en balística: “explosión por simpatía”. Una detonación de un cañón hace detonar otra carga por resonancia (vibra en la misma frecuencia). Al paso de un avión hace vibrar ciertos vidrios de una ventana, pero no todos. Una frecuencia emitida por un frecuencímetro de alta potencia hará saltar los elementos de vidrio de una lampara (es el principio de el cañón sónico). ¿Puede ser que lo que está vibrando en otro lado y que hoy llamamos “otra dimensión”, sea una especie de resonancia de nuestro mundo?

De constituirse como afirmativo lo anterior, nosotros estaríamos inmersos en la intromisión de imágenes y sucesos de otros mundos, es más podría llegar a decirse que estamos viviendo al unísono en otros planos de existencia energética, en otras palabras con viviendo al lado de otros mundos, mundos entra comillas, habitados por otros seres, incluyendo nosotros.

Es aquí donde deseamos incluir nuestro hipótesis de la seres inteligentes de energía coherente EICE, una idea posiblemente enmarcada en la ciencia ficción. Recordemos que hoy día muchas cosas plateadas por este genero literario, se han convertido en realidad y es más, hay científicos que están hurgando en lo escrito por los grandes de este genero literario para buscar ideas sobre fenómenos científicos y su explicación.  

UNA IDEA MUY COMPLEJA - LOS EIEC.

Si pensamos que el ser humano tiene un espíritu de materia muy refinada, podríamos hipotéticamente imaginar que: ¿estaría sujeto a estar vibrando como todo en la naturaleza? Si no fuera así, simplemente escaparía a lo que es una realidad universal. Por el contrario si esa energía fuera una realidad, debe estar sujeta a vibrar en cierto rango de frecuencia o al menos emitir una gama de vibración.   De esto podríamos sacar como consecuencia que esa entidad debe ocupar un espacio dentro del espectro radioeléctrico. De cómo lograría tener conciencia, esto rebasa el actual conocimiento. Sin embargo que esas entidades se les llame fantasmas, espectros o aparecidos existan, esto da fe una historia de miles de años, fotografías, videos y últimamente verificaciones de medición electromagnética.

¿A que nos estamos refiriendo? Sin duda el lector imaginara, nada menos y nada más que a un rango de existencia de lo que genéricamente se le ha llamado el otro mundo.   Esto daría respuesta a la pregunta tan cuestionada de: ¿Dónde esta esa área, ese espacio, esa localización?   Una pregunta que no ha sido respondida por la religión o la ciencia. Y es que de existir ese más allá en algún lado debe estar a no ser que sea en otro estado dimensional donde sin duda exista una física distinta a la que hoy conocemos, incluyendo la cuántica. Pero aún así deberíamos hablar de lo que hoy se conoce como “Campo Punto Cero” en física cuántica, esta es un área donde la frecuencia está también presente, zona donde la energía se genera por si misma cambiando constantemente de polaridad en cierta frecuencia y situada en el espacio entre el núcleo y los electrones de los átomos.

Es aquí donde se plantea la idea del autor, situar un lugar de existencia de los fenómenos paranormales, un sitio donde habitarían muchas cosas, incluyendo una preponderancia para los EIEC – Entes Inteligentes de Energía Coherente”. Estos serían los causantes de focalizar perímetros específicos de emanación radioeléctrica como los encontrados por nuestros equipos. Serían los que alimentan y se alimentan de energías incluyendo la llamada PSI, la cual es emanada por el ser humano. Como es teorizado por algunos estudiosos, nosotros somos inmensos generadores de energía psicobiológica particularmente cuando estamos alterados. Los estados alterados de la conciencia en el ser humano son los que hacen generar esa energía psíquica que como fenómenos paranormales dan curso a la sanación, la telepatía, la telérgia y otros más.

Cada vez que nosotros estamos alterados emitimos energía y esta va alimentar a estos seres llamados EIEC. Las apariciones de fantasmas, espectros o aparecidos no son otra cosa que manipulaciones que solo tienden a alterarnos y de esa forma ser generadores de energía radiante. Mientras más alterado este planeta, más se convierte en una gigantesca bola de radiación, la cual como se puede suponer interesa a estos seres que vestidos como espectros y a veces hasta como Dioses, utilizan el producto. Es por esta razón que estos seres nunca nos van a destruir, así como nos van a ayudar a resolver nuestros problemas, simplemente les somos útiles. Ellos hacen aparecer desde fantasmas, seres del folclor, ángeles o demonios, vírgenes y apariciones religiosas, seres extraños, imágenes de cosas y hasta alienígenas, todo para provocar estados alterados y su consecuencia de emanación energética.

Lo anterior daría explicación a tan variados fenómenos hoy llamados paranormales, es decir más allá de lo normal. En resumen convivimos con fuerzas extrañas que muchas veces nos manipulan y juegan con nosotros. No hay que ir a buscar el otro mundo o el más allá, por que esta entre nosotros. Que no lo podamos ver es otra cosa y es que no lo vemos por que está en un rango de frecuencia dentro del espectro radioeléctrico al cual no tenemos acceso, pero como tal muchas veces lo utilizamos. De modo que si esta hipótesis, planteada en esta serie de artículos, fuera realidad hemos encontrado donde esta el otro mundo o el de los fantasmas, espectros y aparecidos.