El espiritismo tal como lo conocemos hoy, se puso de
moda allá por el año 1847 cuando las hermanas Fox dijeron establecer un
procedimiento para comunicarse con los difuntos. Un sonido de un golpe sobre algo era un “si” y
dos un “no”. Se iniciaba así la
codificación del espiritismo. Aún
cuando existen evidencias que apuntan a que todo fue un fraude ya que los ruidos eran producidos por el chasquido de
los dedos del pie de una de las hermanitas Fox. La idea de haber encontrado un
método para comunicarse con el mas allá encontró buena acogida entre algunos
que estaban de acuerdo con que “si se podía”.
¿HA DONDE VAN LOS ESPIRITUS?
Para los pueblos antiguos siempre existió el lugar donde “vivían” los difuntos, este era el “Seol”, simplemente era un lugar donde iban a para todos los que habían muerto. Los babilonios y los hebreos siempre lo situaron debajo de la tierra, por cierto que casi todas las culturas pensaron lo mismo, así los Mayas hablaban del inframudo. Como era natural donde se convivía o se hacía “vida” espiritual debería ser gobernado por alguien. Para los semitas el Dios que gobernada las profundidades era Mot, quien no era el Diablo. Este último asunto adquirió relevancia en el concepto cristiano donde se separaron los espíritus buenos de los malos y su consiguiente premio o castigo. El Homo Sapiens desde el principio se negó ha aceptar que tras la muerte no había nada, tras la disolución del cuerpo algo permanecía y además en forma eterna. Hasta hoy día la idea permanece aun cuando no hay prueba firme que sustente la supervivencia del hombre. Algo persistía y debería ser una entidad que se pareciera a su progenitor en vida. Así los espíritus tienen brazos, piernas, pies, ojos y boca, que por cierto no le van a servir de nada en la otra vida. Hay creencias que incluso les otorgan la facultad de vestirse a la moda como lo hacían en este mundo, asunto cuestionable en torno a la razón y la lógica. ¿Por qué el vestido si no hay pudor? ¿Por qué los anteojos si no hay globo ocular? ¿Por qué tener manos si no hay nada que asir o agarrar? ¿Por qué tener glúteos si no hay donde sentarse? La idea del espiritismo es un burdo remedo del mundo donde nacemos, crecemos o morimos. ¿Hay en el más allá aparatos celulares, tarjetas de crédito, computadoras o viandas con las cuales endulzar la lengua?
LAS DUDAS.
Todo fenómeno generado por los médiums (verdaderos intercomunicadores entre este mundo y el otro), son explicados por la parapsicología como sucesos del más acá y no del más allá. Es más si los espiritistas se tomaran el cuidado de clasificar científicamente lo que ellos creen que un muerto provoca, se verán enfrentados que ya otros lo han hecho, pero de manera más seria. Es por esto que van mutando y hoy se pueden ver organizaciones de espiritistas científicos, verdaderos profesionales de distintas ramas de la ciencia que pretenden ajustar toda una fenomenología a sus intereses.
Por donde se vea los médiums son lo que la parapsicología titula como “Dotados” o “Paragnómos”. En forma sencilla personas con ciertas habilidades “psí” o psíquicas, pero sin relación con el otro mundo.
¿Cómo entonces explicar los fenómenos extraordinarios que a diario ocurren el mundo? Hay que tomarse el tiempo para estudiar lo que otros han recorrido. Viajes astrales, fenómeno de lo “ya visto”, apariciones misteriosas, espectros, mensajes del futuro, etc. La explicación espirita
es demasiado simple y no se ajusta a todo un universo de cosas increíbles que suceden en nuestro entorno. Quizá estamos enfrentados a una realidad mucho mas complicada como lo es la existencia de los EIEC –Entidades Inteligentes de Energía Coherente.
Luego del boom de las hermanas Fox el francés Kardec tomo la idea y le dio forma. Se le llama el codificador del espiritismo y se hizo famoso por imaginar como se conducen los espíritus.
¿HA DONDE VAN LOS ESPIRITUS?
Para los pueblos antiguos siempre existió el lugar donde “vivían” los difuntos, este era el “Seol”, simplemente era un lugar donde iban a para todos los que habían muerto. Los babilonios y los hebreos siempre lo situaron debajo de la tierra, por cierto que casi todas las culturas pensaron lo mismo, así los Mayas hablaban del inframudo. Como era natural donde se convivía o se hacía “vida” espiritual debería ser gobernado por alguien. Para los semitas el Dios que gobernada las profundidades era Mot, quien no era el Diablo. Este último asunto adquirió relevancia en el concepto cristiano donde se separaron los espíritus buenos de los malos y su consiguiente premio o castigo. El Homo Sapiens desde el principio se negó ha aceptar que tras la muerte no había nada, tras la disolución del cuerpo algo permanecía y además en forma eterna. Hasta hoy día la idea permanece aun cuando no hay prueba firme que sustente la supervivencia del hombre. Algo persistía y debería ser una entidad que se pareciera a su progenitor en vida. Así los espíritus tienen brazos, piernas, pies, ojos y boca, que por cierto no le van a servir de nada en la otra vida. Hay creencias que incluso les otorgan la facultad de vestirse a la moda como lo hacían en este mundo, asunto cuestionable en torno a la razón y la lógica. ¿Por qué el vestido si no hay pudor? ¿Por qué los anteojos si no hay globo ocular? ¿Por qué tener manos si no hay nada que asir o agarrar? ¿Por qué tener glúteos si no hay donde sentarse? La idea del espiritismo es un burdo remedo del mundo donde nacemos, crecemos o morimos. ¿Hay en el más allá aparatos celulares, tarjetas de crédito, computadoras o viandas con las cuales endulzar la lengua?
LAS DUDAS.
Todo fenómeno generado por los médiums (verdaderos intercomunicadores entre este mundo y el otro), son explicados por la parapsicología como sucesos del más acá y no del más allá. Es más si los espiritistas se tomaran el cuidado de clasificar científicamente lo que ellos creen que un muerto provoca, se verán enfrentados que ya otros lo han hecho, pero de manera más seria. Es por esto que van mutando y hoy se pueden ver organizaciones de espiritistas científicos, verdaderos profesionales de distintas ramas de la ciencia que pretenden ajustar toda una fenomenología a sus intereses.
Por donde se vea los médiums son lo que la parapsicología titula como “Dotados” o “Paragnómos”. En forma sencilla personas con ciertas habilidades “psí” o psíquicas, pero sin relación con el otro mundo.
¿Cómo entonces explicar los fenómenos extraordinarios que a diario ocurren el mundo? Hay que tomarse el tiempo para estudiar lo que otros han recorrido. Viajes astrales, fenómeno de lo “ya visto”, apariciones misteriosas, espectros, mensajes del futuro, etc. La explicación espirita
es demasiado simple y no se ajusta a todo un universo de cosas increíbles que suceden en nuestro entorno. Quizá estamos enfrentados a una realidad mucho mas complicada como lo es la existencia de los EIEC –Entidades Inteligentes de Energía Coherente.
Luego del boom de las hermanas Fox el francés Kardec tomo la idea y le dio forma. Se le llama el codificador del espiritismo y se hizo famoso por imaginar como se conducen los espíritus.