Titulado el mayor misterio de la humanidad, la interrogante sobre si existe vida después de la muerte ha preocupado y sigue preocupando a casi la totalidad de la población del planeta.
¿Es verdad que existe una forma de vida luego morir? Que se siente al morir? ¿Que forma de existencia adopta el ser ya fallecido? ¿Se puede probar la vida después de la vida?Estas y otras preguntas pretenden tener respuesta en las enseñanzas de religiones y filosofías que recorren el mundo.
Sin embargo en los actuales tiempos, hombres abocados a determinadas ramas de la investigación han penetrado a los difíciles misterios del mas allá.
Desde experiencias con personas que han abandonado por segundos o minutos este mundo, registros de la perdida de peso del organismo al momento de morir, visiones de personas muertas que esperan acompañar al moribundo o hasta testimonios sobre que algo que se desprende del cuerpo al momento de expirar, todo es misterio de misterio, un problema por resolver.
Todo un universo misterioso y fascinante que de no ser verificado provocaría un vuelco completo a toda una escala de valores.
¿Puede un hombre morir y retomar una vez más la vida?
La muerte, uno de los temas mas apasionantes de la filosofía y la medicina, la muerte frontera entre dos mundos, la muerte final de todo o principio de otro mundo.
¿Puede alguien escapar de ella?
Se hace necesario decir que en honor a la verdad, el titulo que ha recorrido el mundo Vida después de la Vida, está equivocado y como lo esta en ciertas obras se dice también ya que tratan esencialmente del retorno a la vida de personas que han muerto clínicamente.
Quizá lo mas apropiado podría ser: Los que han sido reanimados.
Decimos estos, pues las obras que llevan el titulo de Vida después de la muerte o después de la vida, se circunscriben a testimoniar el fenómeno de retorno y no precisamente a probar la existencia del mundo espiritual.
No obstante hacemos acuso de respeto a los escritores que naturalmente tienen la libertad de titular sus obras como mejor les parezca.
Aclaremos entonces que este artículo se refiere al retorno y no a la existencia misma del alma independiente a la materia viva.
Sobre los testimonios de sujetos que experimentaron el llamado fenómeno de casi muerte, no pueden ponerse en tela de duda, indudablemente son verídicos y vienen sucediendo desde que el hombre es hombre.
Ya en tiempos antiguos se tienen noticias de personas que fueron enterradas vivas (aparentemente estaban muertas) hecho que fue corroborando por la posición del cuerpo del difunto al ser exhumado, lo cual demuestra lo anterior.
De hecho, tiempos atrás no existían los medios al alcance de la medicina de hoy , para detectar la muerte definitiva, la muerte somática y molecular. .
En el incesante buscar de hechos insólitos y muy temprano en la vida, recuerdo claramente haber recopilado varios casos de retorno Las constantes eran: ríos anchos que no podían atravesar las personas, bifurcación de caminos, montañas que no se podía subir y apariciones de seres celestiales o familiares cercanos.
Las experiencias de numerosas personas que han permanecido en el umbral de la muerte, han sido recopiladas y estudiadas por muchos profesionales. Aparentemente según las estadísticas y análisis, no existen los tradicionales lugares como: Cielo, infierno, Paraíso y Juicio Final, por lo menos como lo pintan los conceptos tradicionales.
En su lugar existen: análisis retrospectivo de nuestras vidas, sensación de bienestar o felicidad, una intensa luz o canal fulgurante, la sensación de salir flotar, ver el cuerpo des de el aire, llegar a una puerta o un río, ver a Dios o a Cristo, parientes muertos. amigos o vecinos fallecidos, ciudades de luz sensación de conocerlo todo y experiencias de ser salvados por otros entes espirituales.
La separación del yo, espíritu, alma, cuerpo astral o energía refinada, es la primera experiencia que como constante se repite en las experiencias del retorno.
Algunos como el escritor Johann Hampe en su obra: Experiencias con la propia muerte, llega a la conclusión que la separación se efectúa en dos etapas, en la primera fase la entidad extracorporal se mantiene a cierta distancia y en la segunda se puede mover con libertad aún más allá de la habitación mortuoria.
El Dr. Raymond Moody uno de los mas laureados en este tipo de obras dice La mayoría de personas están seguras de una separación concreta y la describen con imágenes como una niebla, nube, un vaho o un trozo de energía”.
Pese, no cabe duda, que todo esto se constituye como una experiencia única y existen detalles que impresionan unos mas que otros. Así la visualización de una luz o canal de luz, que incluso algunos sitúan como divino o viniendo de cristo, es el más mencionado.
Sin embargo al mismo Dr. Moody dice que las personas reanimadas rechazan conceptos como infierno y cielo pese a estas acostumbradas a convivir con ellos durante toda su vida, dice: Puedo afirmar que en todas las conversaciones que he mantenido a lo largo de mis investigaciones jamás nadie ha mencionado las puestas del cielo, caminos dorados y ángeles con alas y que tocan arpa, el infierno con fuego eterno o diablo con tridentes.
Por lo general podría decirse que las cosas que pasan en el momento de casi muerte, son bastantes sencillas sin mucho adorno, lo cual depende según mi hipótesis, de la cultura e imaginación que la persona en vida.
Así, vemos como el actor Curd jugens al someterse a una operación en Houston el 20 de enero de 1967 cirugía realizada por el Dr. Michael B. el actor sufrió una experiencia fuera de serie.
Dramáticamente el relato después de la operación fue de la siguiente manera: Una lluvia de fuego con llamaradas impresionantes y caras torturadas de condenados.
Jurgens dijo: Obviamente me encontraba en el infierno, sin protección de ninguna clase y expuesto a lenguas abrasadoras del fuego, una mujer vestida de velos negros delgada y sin labios se me apareció, la repentina visión de mi mujer me salvo del infierno al cual ya aprecia estar condenado, la muerte no pudo con Simone, tan llena de juventud y vida.
Una visión realmente apocalíptica digna de un gran actor llena de imaginación y apropiada para un guión fílmico, Curd no mintió, su imaginación estaba presente. En instantes difíciles, volvió a surgir su gran maestría fílmica admirada a lo largo y ancho del mundo.
La cuestión fundamental radica en que si son experiencias de un estado de inconsciencia profunda pero atada aún a la vida o por el contrario verdaderas fases de la autentica muerte ¿Está la persona muerta en realidad o solo es un caso de letárgia? ¿Es la llamada muerte clínica suficiente para decir que el sujeto está muerto de verdad? ¿Puede morir el cerebro sin acusar daños irreparables? ¿Será acaso que las neuronas no entran en el fatal arrastre de la degeneración por falta de oxigeno? ¿Si las personas ha estado en verdad muertas, como es posible que recuerden su experiencia? ¿Será acaso que en realidad no han estado muertas y no pasa de ser una simple experiencia de dramatización del inconsciente?. ¡Esta es mi verdadera hipótesis!
Dejemos aquí que los casos testimonien sobre la verdad del fenómeno llamado “Vida después de la muerte o de la vida”.
Permítanme antes recordar algo ya expuesto con anterioridad, el fenómeno: lo que en realidad se quiere ver, se ve.
No obstante que algunos de los defensores de las experiencias del retorno son médicos (Dr. Moody y Kluber-Ross) y de esta manera conocer la actividad vital del cerebro, su fisiología y procesos de nutrición, parece increíble que sostengan que una persona pueda morir y tornar a vivir.
De lo contrario se debería aceptar que en realidad la mente estuvo activa aun cuando por instantes inmersa en el inconsciente, esto es aceptar consecuentemente que el sujeto no ha muerto.
¿Dónde se apoya entonces la hipótesis de la experiencia de lugares que son visitados por personas casi muertas? Podríamos decir que únicamente en los testimonios, pues tal existencia no es susceptible de ser comprobada.
Varios años han transcurrido desde la primera edición de este libro de mi autoría y poco a casi nada nuevo se ha agregado como prueba irrefutable del retorno de seres humanos de un mundo distinto al nuestro, al menos en su constitución molecular.
No obstante es digno de tomarse en cuenta una serie de estadísticas que investigadores como el Dr. Karlis Osis y Erlendur Haraldsson han realizado en busca de comprobar el fenómeno. En su libro “A la hora de la Muerte”, ellos publican un interesante apéndice sobre las estadísticas de mil casos de experiencias al borde de la muerte.
Me he tomado el cuidado de estudiarlas y pese a ser un testimonio que acredita aparentemente el fenómeno hay indicios de que es precisamente lo contrario.
Veamos entonces algunos datos aportados por estos eminentes científicos.
Cuadro No.1- Identidad de la Aparición.
Vivo 18% Muerto 47% Figura religiosa 30%
Llevarse al sujeto con consentimiento 47%
Llevarse al sujeto sin consentimiento 18%
Cuadro No.2
Seglares: Madre 23% Padre 9% Esposo 18%
Religioso: Dios o Jesús 28% Demonios o Diablo 24%
Cuadro No.3 Diagnosis Primaria:
Cáncer 23% Enfermedades Cardiacas 22%
Cuadro No.4 Características:
Edad: 1-30 años 19%
31-50 años 25%
mas de 50 años 56%
Religión hindú 48% Musulmán 6% Protestante 22%
Católico 15% Ninguna 3%
Grado de religiosidad: Ninguno 5% Profundo 47%
Creencia en otra vida: Creían 92% No Creían 8%
Para el lector acucioso las anteriores estadísticas muestran con evidencia algo que ya repetíamos en paginas anteriores.
¿Es el fenómeno condicionado por el consciente y/o el inconsciente?
Veamos nuestras reflexiones sobre estas interesantes estadísticas.
En el cuadro No.1, se aparecía que en este tipo de visiones no solo aparecen muertos sino imágenes de vivos así como entidades de la fe, ¿Ocupan un lugar en el otro mundo también seres que no han muerto? En relación al propósito se ve claramente la dicotomía vida y muerte, deseo de vivir o morir, eterno pensamiento que acompaña al hombre toda su vida.
En el cuadro No.2, la madre ocupa un lugar privilegiado en las apariciones no así el padre. ¿La imagen estereotipada de protección del regazo materno? Es la parte correspondiente a figuras religiosas, casi en la misma proporción Dios y Jesús compiten con los demonios. ¿Cielo e infierno como desde tiempos inmemoriales nos lo plantea esto la creencia filosófico-religiosa que profesamos?
Cuadro No.3 Aquí se puede apreciar que quienes son más susceptibles de ofrecer el fenómeno son los que tienen una muerte anunciada, como lo es el cáncer o las enfermedades cardiacas, ¿El paciente ya esta preparado o condicionado para la visión?
Finalmente y esto se marca a lo largo de cada una de las estadísticas, las cuales fueron tomadas como muestras entre occidentales e hindúes. Los que durante la vida mantienen creencias afines al fenómeno son los que en alto porcentaje manifiestan los casos de la “Puerta al otro mundo”. Así vemos que el hindú es mas propenso así como el protestante y el católico, pero no así el musulmán o quienes no tienen creencia alguna, se reafirma lo anterior cuando las estadísticas muestran los porcentajes en el grado de religiosidad son casi 10 veces más que los que no las tienen. Aplastantemente los que creían en el otro mundo también, 10 veces más que los escépticos.
Me aventuro a decir que el fenómeno podría tener una explicación en el condicionamiento que en vida ha recibido el sujeto.
Una observación mas, casi nunca en las visiones de mas allá de moribundos occidentales aparecen dioses o personajes hindúes o viceversa en moribundos de la India no aparecen Jesús u otra entidad de la creencia religiosa occidental ¿Por qué?.
Para finalizar, debo hacer un acto de justicia con el trabajo de estos dos profesionales de la psicología, sugiero al lector, leer su obra a la “Hora de la Muerte”; en la cual a pesar de tratar de demostrar la supervivencia del hombre prudentemente los autores hablan de hipótesis y no una de realidad concreta e irrefutable, es más al final en su epilogo muy honestamente tomando como resultado la entrevista hipotética a un resucitado como lo es Lázaro, ellos dicen: Todos tenemos un pasaporte personal que nos permitirán finalmente experimentarlo, pero ese conocimiento no pertenece a este estado de conciencia (sic)
No obstante las observaciones anteriores por encima de todo es un excelente trabajo de investigación que bien vale la pena tomarlo en cuenta.
Cual es la conclusión de este artículo. Expongo aquí mi afirmación:
“LAS EXPERIENCIAS POSMORTEN NO SON MAS QUE DRAMATIZACIONES DEL INCOSCIENTE. NADIE PUEDE RETORNAR DEL OTRO MUNDO, EL QUE MUERTO ESTÁ, MUERTO ESTÁ. EL QUE ES REANIMADO NO ESTABA MUERTO EN REALIDAD, POR LO TANTO SU CREREBRO NO SUFRIÓ DAÑO Y CON CONSIGUIENTE CONTINUO VIVO, POR LO CUAL AUN CUANDO IMPERCEPTIBLE, PROSIGUIÓ SU CAMINO... PENSAR, IMAGINAR , DRAMATIZAR.
Por lo tanto las experiencias de “Vida después de la Vida”, no constituyen un prueba irrefutable de... ¡Como es la otra vida!